11 de febrero de 2012

El tiempo robado

(Escrito hace ya algún tiempo)

En aquellos días deseaba tener tiempo, ese que sentía le había sido robado.

Tiempo para recordarse a ella misma, tiempo para reconocerse, tiempo para entender, tiempo para disfrutar, tiempo para desear, tiempo para dar.

Tiempo para escribir lo que le rondaba por la mente, que era mucho, para reflexionar sobre el papel los aconteceres mundanos que le habían ocurrido.


En aquellos días solo deseaba que el día se extendiera unos horas más, que la luz iluminara más la habitación y que las horas no transcurrieran entre apuntes, libros y artículos rescatados de aquel baúl ya cerrado.

Se había olvidado de lo que importaba, de lo que era imprescindible, de lo que necesitaba, se había olvidado de lo que era no recordar una llamada importante, en la vorágine de acontecimientos se había olvidado que afuera, en la ausencia, alguien la echaban de menos…

2 comentarios:

  1. Siempre nos falta tiempo cuando sucede algo importante en nuestras vidas. Siempre nos falta tiempo. Una vida entera es poco tiempo si uno quiere vivir con toda el alma.

    ResponderEliminar